2014
Los tratamientos de fertilidad como por ejemplo la inseminación artificial y la fecundación in vitro, han evolucionado mucho en los últimos años aunque todos debemos de saber que casi todas las técnicas de reproducción asistida avanzada tienen menos de 35 años desde que se inventaron y estamos hablando de una ciencia «relativamente reciente» aunque debido a la demanda existente, ya muy contrastada y segura.
Actualmente atendemos a un aumento de la demanda de los tratamientos en reproducción asistida ya no sólo por causas hereditarias, como antaño, sino también por modo de vida actual que retrasa la maternidad, el estrés y otros condicionantes psicológicos que pueden producir el acelerado ritmo de vida que llevamos. Además existen otras causas como enfermedades ya mas estudiadas hoy en día como la endometriosis (quistes en los ovarios) o la fibrosis quistica (que produce alteración en el seminograma), factores ambientales o tóxicos químicos que producen disminución en la calidad espermática, infecciones de transmisión sexual que provocan obstrucción en las trompas, miomas uterinos, etc.
Si nos encontramos en la situación de tener que acudir al ginecólogo o a una clinica de fertilidad para que nos ayuden con el embarazo es conveniente conocer los diferentes métodos existentes. Tras un diagnóstico personalizado a la pareja y tras una indicación de tratamiento especializado comenzará el proceso de reproducción asistida.
Dentro de las diferentes opciones existe la inseminación artificial. Este es uno de los tratamientos menos complejos que consiste en que tras una estimulación suave hormonal a la mujer, se prepara el semen en el laboratorio y se introduce a través de una cánula muy pequeña y que no se nota en el útero de la mujer para que de «forma casi natural» se unas los gametos y se implante el embrión en el útero.
Hace ya bastantes años que es mucho más habitual el método de la fecundación in vitro. Consiste en una extracción de un óvulo mediante la punción folicular (puede ser dormida o despierta con anestesia local), la inyección del espermatozoide en él laboratorio (habitualmente esto se hacía sobre una placa de cristal, de donde proviene la coletilla de “in vitro”). Una vez comprobado que se ha producido la fecundación, el óvulo fecundado se introduce dentro del útero para que implante y se forme el embrión. Esta técnica es algo más laboriosa y la estimulación hormonal parecida, aunque generalmente con más dosis, para producir no solo un uno, sino muchos ovocitos (que en condiciones normales se perderían en un ciclo) y por lo tanto más de un embrión que podrá usarse en futuros tratamientos de la pareja, donarse a la ciencia o a otras parejas que lo necesiten (siempre con el consentimiento expreso de los pacientes).
El consejo del médico es fundamental a la hora de ir a una clínica fertilidad
Aunque tengamos preferencia a nivel personal por un método u otro, será el médico con experiencia en asesoramiento en reproducción asistida quien mejor pueda aconsejarnos sobre el que más nos conviene y a que clinicas de reproduccion acudir. No todas las personas responderán del mismo modo, evidentemente. Es importante que optemos por clínica fertilidad que conozcamos gracias a testimonios de primera mano, pero tampoco debemos dejarnos guiar por el éxito en la inseminación artificial o la fecundación in vitro que a nivel puntual que hayan tenido otras personas. Cada caso tiene unas posibilidades de éxito muy personalizada a los problemas individuales que existan. El análisis previo que nos hagan será el que determine cuál es el adecuado para nosotros. Sí que es cierto que las clínicas de fertilidad tienen unos porcentajes de éxito diferentes entre sí y es necesario estar bien informados para saber cuál es el porcentaje de las nuestra.
En la Clínica Avantia fertilidad de Granada dispones de numerosos tratamientos para combatir la infertilidad, tato la infertilidad masculina como la infertilidad femenina, además de un experimentado equipo de profesionales que pueden asesorarle en eltratamiento de fertilidad que mejor resultado le puede dar.
Nuestros resultados en los diferentes tratamientos son los máximos posibles alcanzados y descritos para estas técnicas y para cada caso en particular que se presente. La mayoría de nuestras parejas logran el objetivo alcanzado tras uno o más tratamientos (ya que el porcentaje de éxito por ciclo puede variar desde el 10 al 50% según cada pareja) y sobre todo consideramos que cumplimos el objetivo de que los pacientes reciban el tratamiento en la atmósfera más tranquila, cómoda posible con la seguridad del médico especialista que lleva su tratamiento, siempre a su lado, incluso por vía telefónica 24 horas en el caso de circunstancias urgentes. Para nosotros es fundamental que Ud sea participe de su tratamiento comprendiendo todos los aspectos del mismo lo que le ayuda a afrontar las diferentes etapas y, al fin y al cabo, conseguir la mayor tasa de éxito posible.